Hay más de 40.000 perros censados en la ciudad que cuenta, además, con muchísimos servicios, municipales y privados, pensados para los canes.
Por ejemplo, en más de 40 zonas verdes de Gijón los perros pueden ir sin correa. En muchos parques en el mismo centro urbano hay amplias áreas específicas para que jueguen, como en el Parque Isabel la Católica, que ya merece un paseo por sí mismo, con o sin mascota, por lo bonito que es; en el Cerro de Santa Catalina, donde está el icónico Elogio al Horizonte de Chillida, imprescindible de ver para cualquier turista en Gijón; o en el amplísimo Parque de los Pericones.
A Bérgamo, no obstante, le gusta especialmente el Parque Fluvial en Viesques, porque es lo más parecido a estar en un bosque para él.
Una quinta parte de los hoteles y alojamientos admiten mascotas. También muchísimos bares y restaurantes permiten la entrada con perro, tanto en terrazas como en interior.
Es posible incluso realizar actividades turísticas con tu mascota, como una visita con guía por la ciudad, un paseo en lancha por la costa o una preciosa ruta de senderismo guiada (consulta la lista completa en Civitatis).
Si quieres bañarte en el mar con tu compañero peludo, también puedes: para eso está la playa canina del Rinconín.
Y, por si fuera poco, los perros también pueden acceder a la playa principal de la ciudad, San Lorenzo, entre las escaleras 2 y 8 en temporada baja, del 1 de octubre al 30 de abril.
